martes, julio 31, 2007

Los martes: CINECLUB - 58 - La última tentación de Cristo


The Last Temptation of Christ - 1988 -
Director: Martin Scorsese

Reparto:
· Willem Dafoe (Jesús de Nazaret)
· Harvey Keitel (Judas Iscariote)
· Barbara Hershey (María Magdalena)
· Víctor Argo

Guión: Paul Schrader (basado en la novela homónima de Nikos Kazantzakis)
Música: Peter Gabriel
Fotografía: Michael Ballhaus

En esta reseña no puede escucharse de fondo la música de otro mundo de Peter Gabriel. Faltarán los paisajes del alma, la artesanía de Michael Ballhaus. No llegan mis frases a las de la adaptación de Paul Schrader. Que nadie busque la milagrosa mano del maestro (con minúsculas, de momento) Scorsese. Eso sólo está en la película.

Tampoco quiero controversias religiosas, porque si las quisiera empezaría por lo fácil y no por la sutileza herética, ya que esta película admite el halo divino (fantasía religiosa) pero peca, por lo visto, de remarcar la condición humana de Jesús. Si los radicalismos castradores se oponen por encima de todo al pensamiento, ¿qué pasaría si situamos en la escena a un Jesús que piensa, duda, ama tormentosamente, tropieza, huye, no comprende? El acabose (estoy aquí para incendiar el mundo). Feligreses amotinados en las puertas de las salas. Publicidad gratuita. Indignación de oídas.
Ante todo diré: gracias inquisidores, atizasteis las llamas de mi curiosidad.

Sigo destacando apectos colaterales: el casting perfecto, empezando por el protagonista y acabando por el último figurante.

Un momento mágico: el sermón de la montaña, improvisado, fluyendo felizmente.

Una reflexión: ¿Qué escandalizó a los bobos?, ¿el beso en la boca de Judas? ¿ver a Cristo en una escena de sexo? Menudos cristianos de pacotilla, no distinguir al Hijo del Hombre de Willem Defoe con barba...

Me parece más realista un Pilatos interpretado por David Bowie, pero que ni se molesta en escuchar al pueblo ni al Sanedrín, que condena al reo, sin aspavientos, sin dudar: No importa cómo quieras cambiar las cosas. No queremos que cambien.

¿La frase más blasfema? El Salvador en la cruz grita antes de expirar: Padre, ¿por qué me has abandonado?. Curiosamente esa frase, garante de la naturaleza humana de Jesús, no es una invención... del guión (Mt 27,46; Mc 15,34)

La crueldad, la burla ante lo desconocido, el morbo insano. ¿Jerusalén?

Jesús avanza, no es solemne, ni confiado, tampoco perfecto. Eso sería demasiado fácil. Resucita a Lázaro y se sorprende, se asusta, se conmueve, pelea cada minuto, crece, rectifica, decide, vive.

Una frase: Dios nos ha unido, dicha a Judas. Ese don que Dios otorga al hombre, incluso a su hijo: la elección.
Cerca quedan la traición y su anvés maravilloso, el sacrificio.

Abrumadora la densidad de los símbolos. Edificante la historia de ese Jesús Cristo, bello ejemplo que nadie sigue.

Otra frase: ¿Ves a esos hombres? Están ciegos, tullidos, ellos serán nuestro ejército.

Una pega: ni Scorsese ni yo hemos conseguido ser breves.
Otra vez será.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

me acabas de poner los dientes largos de nuevo... mis padres que nunca le hicieron caso a la recomendacion por edades me la dejaron ver antes de la comunión y lo que más recuerdo de la peli fue la parrafada que me hecho la catequista (y su posterior envio al confesionario como las balas) por verla...

Cambridge dijo...

Algunos momentos son impresionantes: (las profecías, las tentaciones, la resurrección de Lázaro).

La banda sonora es rompedora.

También La Pasión de Mel Gibson tiene sus momentos, sobre todo, la segunda mitad.

HombreRevenido dijo...

Meri, vaya tema el de la catequesis y la confesión. Espero que te guardaras algún pecadillo en la racámara, sin absolución (esos son los mejores).

A mí esta peli me marcó en mi adolescencia por una razón de peso: cuando la echaron en el UHF (por supuesto a las tantas de la noche) programé el vídeo, y no sé por qué coño me equivoqué de hora o retrasaron el inicio y me quedé sin ver la media hora del final. Que es como si te la cascas y no te sale (vaya por Dios, tendré que volver al confesionario).

Cambridge, es impactante toda ella. La Pasión de Mel Gibson es muy interesante también (pese a algún exceso gore), pero carece de la profundidad de esta película, respeta demasiado los evangelios (que serán palabra de Dios y todo lo que queramos, pero literariamente e históricamente son flojitos).

Leon dijo...

A mi me gustó mucho y nunca entendí la polémica que se armó por parte de los fundamentalistas. La imagen de Jesús que transmite es positiva, muy humana.

HombreRevenido dijo...

León, a los fundamentalistas les molesta todo. Y ya si otro fundamentalista le cuenta de oídas lo que otro fundamentalista ha leído en el periódico... no hace falta ver la película, sólo ir y educadamente encender una hoguera.

Anónimo dijo...

Arriano ...