sábado, agosto 11, 2012

Día gnóstico


No penséis que me he olvidado de vosotros.
Por que vosotros sois... umm... no caigo. No importa, habéis venido aquí y eso me infunde respeto.

He pasado por una de esas enfermedades incurables que le hacen a uno perder el oremus y la compostura. La enfermedad se llama: "día 9". Tiene síntomas terribles y secuelas por estudiar.

El año pasado os lo conté a priori: El origen del Planeta de los Simios.
Y este año os lo cuento a posteriori.
Es el día de la marmota oscense. La euforia destilada, los monos de verde y blanco, sin peluca.

Vuelvo al trabajo y a la vida.
Este baño anual en el fango sagrado nos purifica.

Mente tersa, imaginación exfoliada.
A ver si se me luce.

3 comentarios:

Hemithecomix dijo...

Sorprende una entrada en sábado.
Cojonuda la devoción que se le tienen aquí a las fiestas mayores que hace currar a cualquier mono.
Esperemos que esos barros no te provoquen sarpullidos con infección de hongos de esos alucinógenos resacosos. Pues ale el que tenga animo y dinero para gastar que disfrute de la jarana.

El niño desgraciaíto dijo...

Ayer vi una noticia sobre las fiestas de San Lorenzo en el telediario y me pareció ver pasar a la algún mono algo despistado en algún plano del jolgorio...

HombreRevenido dijo...

Hemithecomix, esa es nuestra arma secreta, la sorpresa.
No es gasto, es una inversión en descompresión.

Niño desgraciaíto, milagroso que saliéramos en el telediario y no fuera por ninguna desgracia. ¡Lo celebro doblemente!