sábado, mayo 25, 2013

Los ultraperros (1)


Walter es un señor normal. Bueno, normal normal tampoco. Le gustan las gabardinas estrafalarias, los pantalones demasiado cortos y ponerse zapatos negros con calcetines blancos. Peso a todo, nos recibe cordialmente en su casa de Beavercreek, Ohio. Encendemos la grabadora y nos cuenta su espeluznante historia. La misma que llevamos una semana recopilando a lo largo de la piel de bisonte, nuestros amados Estados Unidos de América.

- Dice usted que el perro se suspendió en el aire.
- En el aire, sí.
- ¿Pero estaba usted tirando hacia arriba de la correa?
- ¿Tirando?... ¡no! por su propio impulso.
- Saltó, entonces.
- Tampoco. Era como si levitara o levitase.
- Suspendido en el aire.
- Suspendidísimo diría yo.

Los animales (decían los diferentes testimonios) no se mostraban aterrados, ni ladraban. Lo asumían con una sospechosa naturalidad. Incluso cuando empezaban a ascender, atraídos por una extraña fuerza magnética.

- Solté la correa cuando sentí que tiraba de mí...
- Soltó al perro, dice.
- Solté la correa porque mis pies se habían despegado del suelo y...
- Soltó al perro. Le parecerá bonito. Él nunca lo haría.

Me gusta atormentar así a los interrogados, con la presión de autojustificarse suelen recordar mucho mejor los detalles. Pero Walter no puede decirme nada más. Llora como un cachorrillo lo que no ha sabido defender como un rottweiler.

Telefoneo a las oficinas centrales del FBI y me salta el contestador. La cosa está que arde: "en este momento todos nuestros agentes están ocupados, permanezca a la espera o inténtelo más tarde". Este misterio del rapto aéreo de los perros es, con diferencia, lo más loco que me ha tocado investigar nunca.
Llego a casa, lleno la bañera (de agua), lleno mi pipa (de tabaco) y doy comienzo a mi rutina de pensar, que siempre acaba en gran idea o en paja.
¿Qué demonios está pasando allí afuera?

(CONTINUARÁ)



La foto está sacada de AQUÍ
y me la ha enviado Molinos a modo de reto bloguero.
Mañana el desenlace.

8 comentarios:

molinos dijo...

¿en la bañera? ¿ una paja? falta la mosca...

..sabía que ibas a hacer grandes cosas con esa foto...

..lagrimones.

molinos dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Eres completamente genial.
Rita.

pazzos dijo...

Un consejo para el sr. Walter: Cambie de marca de pienso que a su perro el Dog Chow le produce demasiados gases.

Peter dijo...

Que fuerte, Santa Teresa de Jesús reencarnada en can. Donde quedó la mística? Y mira que la transverberación ya ne parecía fuerte

NáN dijo...

A ciertas horas de la noche, en los pubs, ver perros levitando es lo más normal del mundo.

De la foto, para mí el misterio fundamente es lo que sucederá cuando ese hombre, aquejado de un estrabismo de pies extremo, se ponga en movimiento. ¿Avanzará penosamente dirigiéndose a la izquierda cuando avance con ese pie, y hacia la derecha con el otro? Podrá volver a casa con la baguette todavía comestible?

Eso sí, como costalero en Sevilla debe de tener un caché de infarto.

aras dijo...

Lo que da una foto de sí...
Esperando el desenlace!

HombreRevenido dijo...


Molinos, calla calla, deja a la mosca sin alas en paz.
La foto tenía esta historia (y muchas más) dentro.

Rita, gracias.

Pazzos, le hacen falta muchos consejos a Walter. La mayoría de moda.

Peter, sin valerse de estupefacientes además. "Los perros místicos" podría ser una buena buena secuela.

NáN, no tiene Walter en la coordinación de pies su punto fuerte. Pero se defiende bien y camina con movimiento salsero.

Aras, ya está listo el desenlace. La foto se las trae...