miércoles, abril 22, 2009

San Jorge


Mañana es el día de San Jorge, y me parece que ninguno de vosotros tiene ni idea de quién fue este tipo peculiar. Así que os lo cuento rapidito.
Jorge de Capadocia era un soldado romano bastante cristiano que vivió en el siglo III o IV. Cuando el emperador Diocleciano dijo aquello de "no quiero ver ni un cristiano ni medio por aquí", en el momento en que las tropas se disponían a iniciar la cacería él cayó en la cuenta: pero si yo mismo soy cristiano. Y se autoapresó.
El martirio corrió por cuenta de profesionales. La impresión fue grande.

Luego el espectro o el santo o lo que sea, se fue apareciendo en intervenciones valerosas, sobre todo en contextos militares, de ahí el arraigo de los pueblos a su figura: porque las naciones se consagran a los santos que les ayudan en el campo de batalla y ningunean a los que, por ejemplo, hablan con los ángeles.

En Aragón (que me multe la guardia civil si me equivoco) y en los antiguos territorios del Reino, se celebra San Jorge por su intervención en la Batalla de Alcoraz (no confundir con la del próximo 9 de mayo).
La Batalla de Alcoraz fue tremenda.

Corre el año 1096 (que se estaba pasando volando) y las tropas aragonesas sitian la ciudad de Huesca, en manos de las hordas islámicas. La cosa está nivelada, con bajas por ambas partes, pero ambos contendientes tienen moral, fe inquebrantable y provisiones. No se está disfrutando, porque la guerra es una cosa seria, pero están llevándolo bien.
De repente llegan refuerzos, los sarracenos, los hijos de la medialuna (lo digo ahora porque perdieron, si no estaría hablando de los gloriosos primos-hermanos del profeta) se hacen poderosos. Se enfrentan ambos bandos con porfía.
La noche se cierne, Pedro I, rey de Aragón arenga a sus hombres, sabe que la cosa se ha puesto fea, pero fea de verdad. Continúa la batalla a mandobles, con flechazos a traición, con malicia, y cuando el ejército cristiano está contra las cuerdas... os lo imaginabais ¿verdad? aparece un misterioso caballero resplandeciente, con la cruz roja en el pecho y se une a la contienda.

Amanece.
Lo único que queda abierto es algún after de mala muerte, pero es el momento de celebrar la victoria, aunque sea con un desayuno consistente.
Todos buscan al caballero fosforescente y no está. Uno de los combatientes afirma: "no era un hombre, era San Jorge encarnado". Y otro le dice "hala chico, no seas peliculero". Pero al final, pensándolo bien, se dieron cuenta de que sí, de que tenía que ser él.

Y precisamente por eso mañana, 914 años después, tengo fiesta.
.

14 comentarios:

Dina dijo...

Oye, ¿y cuando dices que estrenan la peli?... Aaaaaaaaah, yo también tengo fiesta mañana, jeje

Pitufa dijo...

oyeeeeeeeeeeeeee que has dicho rapidito!!!!

dani-elornitorrinco dijo...

Pues aqui en Madrid no es fiesta, porque somos más realistas y no creemos en un Santo que monta a caballo con una armadura fosforita.

Tenemos eso sí a Isidro de Merlo y Quintana, un honorable labrador que se dedicaba a echarse la siesta mientras los angelillos le labraban el campo y luego les decía: "joe, me tirao toa la tarde rezando, ¿habéis acabado ya el barbecho o qué?"

la maru dijo...

Pues ahora estoy más confundida todavía.
El tal Jorge se les aparecío a unos que salían de un after despues de estar celebrando batallitas y dijeron que era un santo? si hombre, y encima a caballo!
Yo creo que debía ser un romano al servicio de la cruz roja que entraba al after a buscar a algun pastillero malherido por las drogas, el cual se inventó toda esta historia.

Ra dijo...

Nos subestimaba, Sr. Reve ;D

Lasa dijo...

Cate toy hecho... lo de San Jorge solo me sonaba por:

http://www.youtube.com/watch?v=05G5mnInXgM

Hermosa infancia...

Gracias por este pedacito de historia :-D

HombreRevenido dijo...

Dina, cualquier día me saco de la manga un guión de la batalla, cogemos 4 sábanas y 4 espadas y la rodamos en un momento.

Pitufa, yo es que no sé cuándo parar.
He intentado resumir, pero a veces cuesta.

Dani, a lo mejor a San Isidro no le dedican un día las naciones guerreras del mundo, pero no deja de tener mérito lo suyo, jeje.

Maru, todas las leyendas tienen su parte de fantasía o tergiversación de la historia. A lo mejor al final no era romano, sino rumano.

Ra, es una costumbre que tengo. ¡Y normalmente funciona!

Lasa, tremendo vídeo.
Más que historia es una leyenda, pero al menos vemos a otro San Jorge, diferente al habitual, sin recrearnos en el affaire del dragón.

burbu dijo...

Peliculero ya se decía por aquel entonces? y tajador?

HombreRevenido dijo...

En aquel entonces se decían las dos palabras, Burbu, pero no te creas que entendían muy bien lo que significaban.

Anónimo dijo...

Qué cosas...

Me ha hecho gracia eso del after...

HombreRevenido dijo...

Me alegro, Anónimo/a.
Era una parte de la leyenda sistemáticamente silenciada a lo largo de los siglos. Alguien tenía que atreverse.

Anónimo dijo...

¿El fosforecente no sería Homer Simpson camino del Moe´s ?.


Tiberio

HombreRevenido dijo...

Eso es otra leyenda, Tiberio. Pero yo creo que por ahí va la cosa. Se bebía demasiado en la reconquista.

el chico de la consuelo dijo...

y luego del after uno dijo nos bajamos a zaragoza y el otro le espeto ¿no hay guebos? y se fueron al loro a comer unas judias, con un plato de longaniza y morcilla
amen